Las ponemos y nos la ponen: Simpático, conflictivo, responsable, buenazo, rebelde, perezoso, vago, aventurero, nervioso, trabajador, flojo…
¿Recuerdas las etiquetas que te colocaron a ti?
Hay etiquetas que aparentemente resultan positivas, pero ojo no te equivoques son igual de perjudiciales porque influyen y condicionan tanto nuestra conducta que al final terminamos creyendo que es un rasgo que nos define de forma tajante y limitadora.
Las etiquetas son excluyentes, es decir “si eres una cosa” no puedes ser su opuesto.
Veamos un ejemplo: ¿Qué crees que pensará y sentirá una persona que desde niño tiene colgado el “San Benito” de ser un niño «muy responsable”?
Los opuestos de “responsable” podrían ser; irresponsable, inmaduro, insensato, cabra loca…¿Cómo crees que condicionará a esta persona el haber cargado con esa etiqueta?
Tendrá creencias del tipo: ¡no puedo salirme del guion! y no se permitirá bajar la guardia, vivirá pensando continuamente en las consecuencias de no ser lo suficientemente coherente: ¿a quién afectará mi falta de sentido común, mis posibles errores, mis descuidos…?
Esta etiqueta aparentemente tan beneficiosa y que colocársela a un niño parece casi un halago y un regalo resulta ser un yugo enorme.
Presenta una carga mental excesiva, limitará mucho sus ganas de experimentar y de vivir la edad que les corresponde en ese momento.
🎯 Te invito a que realices este ejercicio en casa y pienses en las etiquetas que te colocaron y las que has colocado tú…
Cuando las tengas identificadas hazte las siguientes preguntas:
- Si soy…(etiqueta) ¿Cuál es mi opuesto?
- Sí soy… (etiqueta) ¿Qué NO puedo ser?
- Si soy… (etiqueta) ¿Qué me supondrá un esfuerzo? ¿En que tendré dificultades o limitaciones?
Hazle creer a una persona que es un desastre desde que nace y es muy probable que lo sea en el futuro.
ETIQUETAS Y SU RELACION CON EL EFECTO PIGMALIÓN
¿Conoces lo que es el efecto Pigmalión?
El efecto Pigmalión es un término que se utiliza en psicología para referirse al fenómeno por el cual las expectativas y las creencias que posee una persona influyen directamente en las conductas, en el rendimiento y en los resultados de otra, bien sea de manera positiva, produciendo un alto rendimiento, o por el contrario afectando de manera negativa sobre el mismo, saliendo así perjudicado.
Esto nos demuestra cómo las expectativas(etiquetas) del padre, madre, profesor, sobre el niño pueden condicionar su comportamiento hacia él y afectar su evolución académica.
NI POSITIVAS NI NEGATIVAS LAS ETIQUETAS SIEMPRE LASTIMAN Y LIMITAN
Las etiquetas de manera muy significativa acaban limitando el desarrollo de la persona “ya que a la hora de relacionarse o de percibirse a sí mismo acaba comportándose de acuerdo a la etiqueta que le han puesto”.
Si deseas ampliar información sobre este tema no dejes de leer: «Niños sin etiquetas”
Un magnífico libro de Alberto Soler y Concepción Roger, un manual fácil de leer, ameno y con rigor científico. Muy práctico, lleno de consejos y ejemplos para que puedas aplicar a tu día a día un estilo de crianza basado en el respeto, el sentido común y con gran inteligencia emocional.
Un básico que no puede faltar en tu biblioteca si eres papá o trabajas con niños o adolescentes.
Así que ahora que somos más conscientes de que nuestras palabras, gestos, creencias y acciones influyen en el otro, ¿por qué no utilizarlo para reforzar sus capacidades y generar en él un sentimiento de valía y buena autoestima que le acompañe toda su vida? 😉
By @lidiacoach🥰
😉 Os recomiendo: Carta de tu hijo adolescente” Necesito odiarte y que sobrevivas a ello”
